Seis libros para pensar el feminismo: grietas en el pensamiento, puños en el papel
Libros
Por: Carolina De La Torre - 04/07/2025
Por: Carolina De La Torre - 04/07/2025
Desde hace siglos, las mujeres han caminado sobre un suelo que nunca fue suyo. Lo habitan, lo cultivan, lo sostienen, pero su voz ha sido relegada a los susurros. En este eco de resistencia, la literatura feminista se alza como un puño cerrado, una lámpara encendida en medio de un cuarto oscuro.
Seis libros son indispensables para quien quiera comenzar a entender las hebras de este tejido complejo que es el mundo regido por hombres. El segundo sexo de Simone de Beauvoir (1949), La invención de las mujeres de Oyẹrónkẹ́ Oyẹwùmí (1997), El género en disputa de Judith Butler (1990), Teoría King Kong de Virginie Despentes (2006), Pan y rosas de Andrea D'Atri (2004) y Calibán y la bruja de Silvia Federici (2004) son no solo textos, sino sismos en el pensamiento, piezas que descosen y remiendan las ideas sobre lo que significa ser mujer.
Beauvoir lo dijo con frialdad quirúrgica: "No se nace mujer, se llega a serlo". En esta obra, desmenuza cómo la mujer ha sido construida como el "Otro", siempre definida en relación al hombre, como su sombra, su espejo, su negación. El segundo sexo no es solo un libro: es un espejo sin concesiones en el que se reflejan los mecanismos de la subordinación.
Oyẹwùmí rompe con la idea de que el género es una categoría universal. Su obra es un desmantelamiento de la mirada eurocéntrica que ha moldeado el feminismo y una afirmación rotunda de que la división entre "hombres" y "mujeres" no ha sido una constante en todas las culturas. Si el feminismo es una puerta, este libro es la llave que permite verla desde otro lado.
Si Beauvoir puso la primera piedra y Oyẹwùmí deshizo la universalidad del género, Butler dinamitó la categoría misma. El género en disputa plantea que el género no es una esencia, sino un performance, un acto repetido hasta que se vuelve natural. Lo que creemos "femenino" o "masculino" no es más que una coreografía impuesta, un teatro que nos han obligado a interpretar.
Virginie Despentes no pretende ser elegante ni diplomática. Su libro es un puñetazo que desgarra cualquier imagen pulcra del feminismo. Teoría King Kong es una declaración de guerra contra la hipocresía de una sociedad que condena a las mujeres por sobrevivir como pueden. Violencia, deseo, prostitución y rabia se entretejen en este manifiesto urgente y necesario.
Andrea D'Atri nos recuerda que no hay feminismo sin lucha de clases. Pan y rosas recupera la historia de las mujeres trabajadoras y su papel en las revoluciones. No basta con exigir derechos, hay que desmontar el sistema que explota los cuerpos, las vidas y la dignidad de las mujeres.
Silvia Federici traza una línea directa entre la caza de brujas y la consolidación del capitalismo. No fue un episodio aislado, sino una estrategia para disciplinar los cuerpos y destruir la autonomía femenina. Leer Calibán y la bruja es entender que el control sobre las mujeres ha sido siempre una pieza clave en la maquinaria económica y política.
Estos libros no son respuestas, sino punzantes preguntas que son lanzadas, provocaciones que desmantelan lo que creemos saber. Acercarse a estas páginas llenará el pensamiento de grietas y una voz que, quizá por primera vez, deje de susurrar y se atreva a gritar.