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El Día de Muertos no solo se celebra en los altares o con flores de cempasúchil, también se honra a través del sabor y la tradición mexicana

En el restaurante Cascabel, la chef Lula Martín del Campo nos guió en una experiencia culinaria inolvidable junto a cerveza Bohemia, donde los aromas del pan de muerto, la textura de los platillos y la frescura de la cerveza se entrelazaron en una ofrenda viva al arte gastronómico de México.

Durante esta experiencia, los asistentes disfrutamos de un recorrido por distintos sabores de temporada, maridados con las variedades de Bohemia, una de las cervezas artesanales mexicanas más emblemáticas, con más de 120 años de maestría cervecera.
Bohemia Cristal aportó frescura a una delicada sopa de quelites gloriosos.

Bohemia Pilsner equilibró la intensidad de una tostada de guacamole con salsa macha, pepitas y chapulines.

Y la clásica cerveza Noche Buena, ícono de los últimos meses del año, resaltó la dulzura y las especias de la calabaza de temporada.

Cada platillo fue un homenaje a la gastronomía mexicana, donde los ingredientes locales se combinaron con la complejidad y carácter de cada cerveza. Pero el cierre fue aún más especial: bajo la guía de la chef Lula Martín del Campo, preparamos nuestro propio pan de muerto, símbolo ancestral que representa el ciclo de la vida y la muerte. Su aroma a azahar y mantequilla llenó el espacio, recordándonos que cocinar también es una forma de honrar la memoria.

“El pan de muerto es una tradición que nos conecta con nuestra historia y nuestra identidad”, compartió la chef Lula. “Cada receta y cada aroma nos recuerdan la importancia de celebrar la vida y hacerlo en compañía”.

Con esta iniciativa, Bohemia celebra sus 120 años reafirmando su compromiso con la cultura, el arte y las tradiciones que hacen de México un país con una riqueza culinaria única. A través de experiencias como esta, la marca invita a reinterpretar nuestras costumbres con respeto, creatividad y un toque de sabor inconfundible.

Más que una cena, esta fue una celebración del alma mexicana: una combinación de cerveza, pan de muerto y tradición, donde el tiempo se detiene para recordar, brindar y compartir.