Musk renuncia al gobierno estadounidense mientras sus empresas se enriquecen
Política
Por: Yael Zárate Quezada - 05/30/2025
Por: Yael Zárate Quezada - 05/30/2025
En un movimiento que ha generado sospechas, Elon Musk puso fin a su participación como asesor del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) en el gobierno de Donald Trump. Sin embargo, mientras el magnate sudafricano abandona formalmente la política, sus empresas se encuentran en una posición más fuerte que nunca. Lo que parece una ruptura podría, en realidad, ser una jugada maestra.
La noticia llegó a través de un mensaje en X —la red social de su propiedad— donde Musk confirmó que daba por terminada su participación en la maquinaria gubernamental. DOGE, la oficina que prometía "hacer más con menos" mediante el recorte de agencias y burocracia. A pesar de haber iniciado con metas ambiciosas para reducir el gasto federal en hasta 2 mil millones de dólares, Musk se vio obligado a ajustar sus aspiraciones a una cifra mucho menor: 150 mil millones.
Pero mientras Musk se “desgastaba” en Washington, sus empresas florecían. Según Forbes, SpaceX, Tesla y xAI Holdings han visto incrementos colosales en su valor y acceso a contratos estatales. SpaceX, en particular, está en posición de asegurarse miles de millones de dólares gracias a las políticas impulsadas por el propio DOGE, que desmanteló entidades federales y frenó investigaciones regulatorias que podrían haber afectado sus operaciones.
Este escenario sugiere que la relación entre Musk y Trump ha sido mucho más transaccional que ideológica. El empresario respaldó públicamente al expresidente tras el intento de asesinato en Pensilvania, y desde entonces su fortuna ha aumentado en 170 mil millones de dólares, al alcanzar los 419 mil millones. Incluso cuando las acciones de Tesla bajaron un 20% desde el regreso de Trump a la Casa Blanca, siguen por encima del nivel que tenían antes de su apoyo público.
Musk se despide del gobierno, pero sus negocios están más ligados al poder que nunca. SpaceX vale ahora 350 mil millones de dólares, casi el doble que antes del regreso de Trump. Y la fusión de X con xAI disparó su valuación conjunta a 113 mil millones, más del triple que hace un año. ¿Realmente Musk se está alejando de la política o solo ha encontrado una forma más rentable de influir sin llevar la etiqueta?