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Mahmoud, 9 años, sin brazos: la foto que el mundo no debería olvidar

Sociedad

Por: Mateo León - 04/17/2025

La foto ganadora del World Press Photo 2025 muestra el drama humano en Gaza y reivindica el poder del periodismo visual como testimonio.

Hay imágenes que van más allá de documentar un instante: desgarran el tiempo. La fotografía ganadora del World Press Photo 2025, capturada por la fotógrafa palestina Samar Abu Elouf, es una de ellas. En ella, un niño de nueve años, Mahmoud Ajjour, muestra lo que queda de su infancia tras perder ambos brazos en un ataque israelí en Gaza. La escena, tomada en Doha, donde fue evacuado para recibir tratamiento médico, trasciende el fotoperiodismo: es un grito congelado en la luz.

Abu Elouf, también refugiada, captó la imagen mientras compartía espacio con otros gazatíes desplazados. Trabajando para The New York Times, su lente recogió más que el horror: mostró dignidad en medio del dolor, vida resistiendo en ruinas.

Una fotografía como testimonio

“Después de regresar para urgir a su familia a seguir adelante, una explosión le arrancó un brazo y le mutiló el otro”, explicó la fundación World Press Photo. Mahmoud sueña con prótesis, con volver a ser niño. Pero su historia no es una excepción: en diciembre de 2024, Gaza ya contaba con el mayor número de niños amputados per cápita en el mundo, según datos de la ONU.

La imagen premiada recuerda que detrás de cada cifra hay una vida. Que el periodismo visual aún puede ser un acto de resistencia. Y que el arte, cuando nace del dolor y no del espectáculo, tiene el poder de conmover y movilizar.

Fotoperiodismo como conciencia planetaria

La edición 2025 del World Press Photo coincide con su 70 aniversario. Su directora, Joumana El Zein Khoury, reconoció que, al mirar el archivo del concurso, hay “demasiadas imágenes como la de Mahmoud”. El homenaje a quienes arriesgan la vida por contar estas historias fue claro: “Estoy eternamente agradecida a los fotógrafos que, a pesar del riesgo personal y el costo emocional, registran estas historias para darnos a todos la oportunidad de entender, empatizar e inspirarnos a actuar”.

Dos finalistas acompañan esta narrativa global de herida abierta: Cruce nocturno, de John Moore, retrata a migrantes chinos tiritando bajo la lluvia tras cruzar la frontera México-EE.UU.

Cruce nocturno, de John Moore, retrata a migrantes chinos tiritando bajo la lluvia tras cruzar la frontera México-EE.UU

«Cruce nocturno», John Moore

Por otro lado, Sequías en el Amazonas del fotógrafo mexicano-peruano Musuk Nolte, revela cómo la selva más grande del planeta se transforma en desierto.

Sequías en el Amazonas del fotógrafo mexicano-peruano Musuk Nolte, revela cómo la selva más grande del planeta se transforma en desierto

«Sequías en el Amazonas», Musuk Nolte

En suma, tres imágenes que retratan tres heridas: guerra, migración y cambio climático.

¿Puede una imagen cambiar el mundo?

Las fotografías ganadoras serán expuestas en más de 60 ciudades del mundo. Verlas no será un ejercicio estético: será un recordatorio brutal de nuestra época. En un presente saturado de imágenes vacías, estas instantáneas nos exigen algo más: memoria, acción, responsabilidad.

El rostro mutilado de Mahmoud Ajjour no es solo el de una víctima: es el de una generación atrapada entre el fuego cruzado de la política, el olvido mediático y la deshumanización global. Y también, quizás, el de una esperanza encarnada en el periodismo que aún se atreve a mirar.