¿Los lobos se alejan de la manada? Wall Street le da la espalda a Donald Trump
Sociedad
Por: Yael Zárate Quezada - 04/08/2025
Por: Yael Zárate Quezada - 04/08/2025
Durante años, Donald Trump se ha jactado de conocer el lenguaje de los negocios mejor que nadie. Esa ha sido su carta de presentación en la arena política: el empresario que iba a administrar el país como una compañía, que sabía negociar con la presión de una junta directiva imaginaria y que prometía un “gran regreso” para la economía estadounidense.
Pero ahora, varios de los gigantes financieros que alguna vez lo apoyaron —los llamados "lobos de Wall Street"— comienzan a marcar distancia. Y lo hacen con un lenguaje que, para Trump, debe sonar más doloroso que cualquier sanción política y esa es la pérdida de confianza del mercado.
Los llamados de atención no vienen de cualquier persona. Bill Ackman, el inversionista que alguna vez defendió la visión económica de Trump, ahora califica como “error” el nuevo régimen comercial de los aranceles. Desde su cuenta en X (antes Twitter), advirtió que gravar indiscriminadamente al mundo en nombre del nacionalismo económico es una estrategia peligrosa.
“Creo firmemente que lanzar aranceles el 9 de abril contra todo el mundo —que exceden enormemente lo que se nos está cobrando— es un error”.
How’s this for a simple approach?
— Bill Ackman (@BillAckman) April 7, 2025
We keep 10% across the board tariffs for the special privilege of doing business with the U.S. to compensate us for the investments we have made in global defense, health and otherwise, and to compensate our country for historically unfair trade…
Y él no está solo. Stanley Druckenmiller, el financiero que compartió estrategias con George Soros, y Dan Loeb, también dejó en claro que no se puede construir prosperidad desde el aislamiento.
Pero quizás la crítica más simbólica proviene de Jamie Dimon, CEO de JPMorgan Chase. En su carta anual a accionistas, un documento que Wall Street lee con la misma atención con que un astrónomo mira el firmamento, Dimon lanza una advertencia:
Cuanto antes se resuelva este problema, mejor, porque algunos de los efectos negativos aumentan de forma acumulativa con el tiempo y serían difíciles de revertir.
Esto al pronunciarse sobre la fragmentación de las alianzas económicas a futuro.
Trump, fiel a su estilo, no ha dado señales de retroceder, pero este puede ser un indicio de que, cuando los lobos empiezan a aullar en otra dirección, el eco puede anunciar un cambio profundo.
Cabe mencionar que durante la mañana de este lunes, los tres principales indicadores bursátiles de Estados Unidos registraron sus niveles más bajos en más de un año. Al mismo tiempo, el índice de volatilidad CBOE —conocido como el termómetro del temor en Wall Street— superó los 60 puntos, alcanzando su marca más alta desde agosto de 2024, por lo que se hablaba de un lunes negro.