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Tres escritoras que, con sus palabras, no solo relataron historias, sino que nos invitaron a habitar otros mundos. Clarice Lispector, Gisèle Prassinos e Isabelle Allende, voces que desafían el tiempo y nos revelan lo invisible de la vida.

En el  universo del arte, hay nombres que se aferran al tiempo con más fuerza que otros: incluso cuando susurran y se esconden entre cierta opacidad, dejan una huella inamovible. Entre esos susurros encontramos a tres escritoras que, desde su mundo interior, han tejido historias que despiertan, interrogan y conmueven. Son voces que quizá no conocías, pero que valen la pena descubrir. 

Te las presentamos a continuación.

 

Clarice Lispector

Clarice Lispector, nacida en Ucrania en 1920 y criada en Brasil, desgarraba la realidad para exponer su alma. En obras como La pasión según G.H., Lispector convierte la escritura en un acto de despojo, un intento por abrazar lo inefable. Sus personajes son seres suspendidos en el laberinto de sus propias mentes. Su escritura es un impetuoso río que aprisiona todo lo que encuentra, dejando al descubierto las resecas grietas de nuestra humanidad.

 

Gisèle Prassinos

Gisèle Prassinos, escritora francesa nacida en 1920, es una fascinante exponente del surrealismo. Comenzó a escribir a los catorce años textos que ya entonces desafiaban las convenciones literarias, mezclando el perfecto onírico absurdo. En obras como La sauterelle arthritique, Prassinos crea universos donde la lógica se desvanece y lo cotidiano se transforma en una suerte de químera. Su escritura es un juego de espejos que reacomoda la realidad, invitándonos a conocer el mundo desde otros ojos.

 

Isabelle Allende

Isabelle Allende, escritora oriunda de Chile, nacida en 1942, es una de las voces más reconocidas de la literatura latinoamericana. En novelas como La casa de los espíritus, ya un clásico, Allende teje historias que mezclan lo mágico con lo real, creando mundos donde lo extraordinario se transforma en cotidiano. Sus personajes, llenos de fuerza y vulnerabilidad, nos presentan el amor,la pérdida, la resistencia y la esperanza. Allende no solo escribe historias; vive en ellas, las siente, y transporta su vivencia a tu propia alma.

 

Estas mujeres nos recuerdan el poder de lo sutil, de lo que no se dice pero se siente. Sus obras son pasadizos abiertos a otros universos donde, se ve, se siente y se existe diferente. Clarice Lispector, Gisèle Prassinos e Isabelle Allende nos invitan a desnudarnos ante lo inexorable de la vida, a confrontar nuestras propias preguntas, a mirar de frente lo que preferimos ignorar. 


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