«Millefleur» de Julieta Gil: memoria y transformación en la era digital
Arte
Por: Juan Pablo Carrillo Hernández - 02/04/2025
Por: Juan Pablo Carrillo Hernández - 02/04/2025
Julieta Gil es una artista de origen mexicano que ha desarrollado su obra en torno a los ejes de la memoria, el espacio público y la materialidad, con las oscilaciones y tensiones que cada uno de esos conceptos lleva consigo, por ejemplo, el olvido, la visibilidad, la virtualidad, por mencionar sólo algunas de las más implícitas y explícitas de su trabajo.
La obra de la artista ha sido expuesta en algunos de los recintos más importantes del arte contemporáneo en México, como el Museo Tamayo, el Laboratorio Arte Alameda y el Centro de Cultura Digital, además de contar también con participación en el Festival MUTEK MX. Asimismo, los museos de arte de Nevada, Palm Spring y SACD han acogido sus piezas.
Este año, Julieta Gil fue seleccionada para intervenir el espacio conocido como “Patio” del Salón ACME, una de las ferias de arte de las que se desarrollan durante la primera semana de febrero en la Ciudad de México, temporada que ya es conocida como la “semana del arte” en la capital mexicana.
Para Salón ACME, la artista desarrolló la pieza Millefleur, en la cual parte de una técnica europea de tapizado particularmente popular en la Edad Media que multiplicaba dibujos de flores, plantas y otros motivos botánicos, formando con ello fondos a un tiempo hipnotizantes y laberínticos, saturados hasta el exceso, de patrones casi fractálicos, sin principio ni final.
Para su intervención, Julieta Gil reinterpretó esta técnica llevándola, por un lado, al modelaje digital en 3D, al respecto de su materialidad, y, en el aspecto conceptual, al territorio de la memoria: la personal y la pública, la íntima y la de esos espacios que compartimos con otros en nuestra vida diaria. Esto con una particularidad adicional: el efecto que sobre nuestra manera de recordar (y mirar) tiene ahora el mundo de representación en que vivimos, donde muchas de nuestras experiencias parecen llevar por default el germen de la virtualidad, el anhelo de viralización o el imperativo de gustar y ser deseable.
Compartimos a continuación el texto con que Julieta Gil presentó Millefleur el 22 de enero pasado en Proyectos Públicos la sede de Salón ACME No. 12, cedido amablemente por la propia artista para Pijama Surf.
«Millefleur» («Milflores»)
Presentaré una instalación multimedia compuesta por visuales de flores que conforman una serie de relieves y texturas abstractas. A partir de archivos fotográficos que he ido recolectando durante mis paseos, construyo modelos digitales tridimensionales que más allá de replicar la naturaleza, buscan acercarnos a habitar nuevas dimensiones en ella que quizás no hemos percibido aún. La instalación se propone como un espacio ficticio que permite la recolección y la conservación de avistamientos florales procedentes del plano físico. La condensación de este registro floral también remite a la manera en que la memoria, siempre imperfecta, altera y abstrae los recuerdos. Vivimos en una era de simulación e hiperrealismo, y a través de este trabajo busco desestabilizar esta lógica de construcción de imágenes y de representación de la realidad. En el proceso de creación experimenté con conceptos como el fallo, la baja resolución y la fluidez en el ámbito digital. El nombre de la obra hace referencia a un estilo que fue muy popular en los tapices durante la edad media en Europa. Literalmente significa "mil flores" y se refiere a un fondo realizado con muchas flores y plantas, que en ocasiones se ve interrumpido por imágenes de seres fantásticos como los unicornios.