*

Estudio confirma que fluoruro en el agua reduce el IQ, especialmente en los niños

Salud

Por: Agatha Capote - 08/22/2024

Un informe realizado y publicado por el Programa Nacional de Toxicología de Estados Unidos sugiere que niveles altos de fluoruro en el agua pueden reducir el IQ en niños y afectar otros aspectos de su desarrollo cognitivo

Un informe reciente del gobierno de Estados Unidos ha generado controversia al concluir que niveles de fluoruro en el agua superiores al doble del límite recomendado están relacionados con un menor coeficiente intelectual (IQ) en niños. Este hallazgo, basado en estudios previos y respaldado con "confianza moderada", marca la primera vez que una agencia federal reconoce un posible riesgo neurológico asociado con altos niveles de fluoruro. Aunque el fluoruro ha sido celebrado por su capacidad para fortalecer los dientes y prevenir caries, este nuevo informe pone de relieve posibles efectos adversos en el desarrollo cerebral de los niños, especialmente en aquellos expuestos a concentraciones superiores a 1.5 miligramos por litro.

El informe, realizado por el Programa Nacional de Toxicología, revisó estudios de diversos países como Canadá, China, India y México, y encontró que el agua con más de 1.5 mg/L de fluoruro se asocia consistentemente con un IQ más bajo en niños. Aunque no se cuantificó exactamente la reducción en puntos de IQ, algunos estudios mencionados indican una disminución de entre 2 a 5 puntos en niños con mayor exposición.

Desde 2015, las autoridades sanitarias de EE.UU. recomiendan un nivel de fluoruro de 0.7 mg/L en el agua, una reducción respecto a los 1.2 mg/L sugeridos previamente. Este ajuste fue hecho para prevenir la fluorosis dental, una condición que causa manchas en los dientes.

El debate sobre los efectos neurológicos del fluoruro no es nuevo, pero este informe es uno de los más rigurosos y amplios hasta la fecha. Aunque el estudio no ofrece conclusiones definitivas sobre los riesgos a niveles más bajos de fluoruro, ni sobre los posibles efectos en adultos, sí sugiere la necesidad de nuevas políticas y estudios más profundos.

En resumen, este informe ha reavivado la discusión sobre el equilibrio entre los beneficios dentales del fluoruro y sus posibles riesgos para el desarrollo neurológico, especialmente en niños y fetos. A medida que se realicen más investigaciones, podrían surgir nuevas recomendaciones sobre la fluoración del agua y la exposición al fluoruro en general.

El estudio se publicó con el título Fluoride Exposure: Neurodevelopment and Cognition en el sitio del Programa Nacional de Toxicología de Estados Unidos y está disponible en este enlace (en inglés).