¿Conoces las diferencias entre las vacunas Sputnik y AstraZeneca? Aquí te compartimos de qué están hechas, nivel de eficacia, tiempos de aplicación y más diferencias entre las dos vacunas contra la covid-19.
En junio de 2020, el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas confirmó que la tercera fase de pruebas de las vacunas desarrolladas por la Universidad de Oxford y AstraZeneca comenzaría en julio de 2020. Finalmente, el 15 de febrero de 2021 la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó la vacuna contra la covid-19 de AstraZeneca/Oxford para uso de emergencia.
Sputnik V fue la primera vacuna contra esta enfermedad registrada en el mundo y fue desarrollada por el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya y aprobada en Rusia el 11 de agosto de 2020 por el Ministerio de Salud de la Federación Rusa. La distribución masiva de emergencia de la vacuna comenzó en diciembre de 2020 en varios países, incluidos Rusia, Argentina, Bielorrusia, Hungría, Serbia y Emiratos Árabes Unidos, y en febrero de 2021, 20 países ya la distribuían.
La Oxford/AstraZeneca está hecha a través de la versión atenuada y modificada del virus del resfriado común de los chimpancés, también conocido como adenovirus. El patógeno ha sido transformado para exprese, al igual que las anteriores, la proteína Spike S y el cuerpo reaccione ante ella.
Sputnik V usa un virus vector como la de AstraZeneca. Pero, en el caso de Sputnik V, este virus está inactivo y no puede reproducirse, por lo que también genera una respuesta inmune del cuerpo que permite la inmunización. A diferencia de Oxford/AstraZeneca, Sputnik V llegó a pocos países europeos debido al veto.
Según sus propios cálculos, Oxford/AstraZeneca garantiza una inmunidad del 90% y Sputnik V del 95% con esquema completo. Esto se debe sobre todo a las diferencias en su composición.
Por su parte, la OMS indica que la vacuna de AstraZeneca "tiene una eficacia del 63.09% contra la infección sintomática por SARS-CoV-2" después de la segunda dosis. Este dato coincide con el difundido por la Secretaría de Salud de México.
Por otro lado, la OMS continua evaluando la vacuna Sputnik V y Rusia sigue insistiendo en su aprobación para uso de emergencia. Mientras tanto, Sputnik V no es válida para viajar a los países que pertenecen a la Unión Europea ni a Estados Unidos, Canadá o cualquier otro país que sólo acepte vacunas aprobadas por la OMS.
Aunque Moderna y Pfizer/BioNtech son las que han demostrado mayor tasa de inmunidad, su conservación se complica para muchos países. La vacuna de Pfizer/BioNtech necesita temperaturas de entre -70 y -80 grados centígrados para conservarse. La de Moderna necesita -20 grados centígrados para aguantar 6 meses y, en caso de estar entre 2 y 8 grados, podría resistir un máximo de 30 días.
En el caso de AstraZeneca y Sputnik V, ambas pueden aguantar perfectamente entre los 2 y los 8 grados centígrados. Esto hace que se abaraten notablemente los costos de almacenaje y que las dos versiones sean óptimas para llegar a países de recursos limitados.
AstraZeneca requiere un lapso entre ambas dosis de 8 a 12 semanas. La segunda dosis deberá aplicarse de los 56 a los 84 días después de la primera. En el caso de Sputnik V, se recomienda aplicar la segunda dosis 21 días después de la primera.
De los efectos secundarios ni hablamos, porque de acuerdo con los expertos los síntomas varían según las circunstancias en que se encuentra cada persona al ser vacunada. "Y recuerden, amigos, vacunarse salva vidas". Así que es mejor estar vacunado, sin importar la que te toque.