*

A 1 año de que el tratamiento con psilocibina sea legal, la sustancia genera interrogantes

La psilocibina se perfila como la nueva gran medicina alternativa y quizá también como el nuevo gran negocio. Un artículo publicado en la revista Scientific American señala que es muy probable que esta sustancia psicodélica, que se encuentra naturalmente en los llamados "hongos mágicos", obtenga licencia para ser administrada como un tratamiento para la depresión, particularmente aquella asociada entre pacientes terminales.

Desde hace un par de años, diversas pruebas clínicas a este respecto han sido aprobadas por los organismos correspondientes en Estados Unidos. Al mismo tiempo, empresas como COMPASS Pathways han recibido inversiones multimillonarias para desarrollar productos y modelos de tratamientos. La efectividad de la psilocibina para tratar la depresión y otras condiciones mentales hace pensar que el potencial económico de esta sustancia podría ser tan grande como el de la marihuana, especialmente porque su efectividad parece ser mucho mayor, si bien, a diferencia de la marihuana, la psilocibina no puede ser presentada como una "panacea", es decir, un medicamento de amplio espectro, como sí se ha promovido a la marihuana, cuyos componentes activos se usan para todo tipo de enfermedades y dolencias, desde dolores de cabeza o de articulaciones hasta cáncer. 

Scientific American hace una observación interesante que podría convertirse en un escollo en el camino a la legalidad de la psilocibina. Las pruebas realizadas en diversas universidades en los últimos años arrojan resultados llamativos. Al parecer, las experiencias clínicas con psilocibina suelen producir cambios importantes en la personalidad de los pacientes, incluida una tendencia a hacer que individuos que se definían como ateos o agnósticos, luego del consumo de psilocibina empiezan a considerarse espirituales y algunos confirman incluso la existencia de Dios. De hecho, la efectividad del tratamiento se ha correlacionado con la intensidad mística de la experiencia.Se borran las fronteras entre la cura química y la cura mística o la cura del sentido existencial. La revista señala que este efecto, en una sociedad secular, podría ser un problema. 

Pero algo que podría recibir mayor oposición en primera instancia es que la psilocibina también parece hacer que las personas se vuelvan más "liberales". Luego de experimentar con la sustancia, individuos que antes calificaban como "conservadores" tienden a manifestar una menor identificación con posiciones políticas autoritarias y, en pruebas de personalidad, obtienen resultados que los acercan más a posiciones de "apertura" (openness), lo cual se asocia con valores liberales como la tolerancia, el diálogo, la aceptación de otros puntos de vista, etcétera.

Por supuesto, no se puede concluir con toda seguridad que la psilocibina haga que una persona cambie de partido político o modifique una cierta preferencia electoral, pero el solo hecho de que parezca poder ocurrir ya es algo sumamente notable, teniendo en cuenta los miles de millones de dólares que se gastan en la política para influir en el voto de los ciudadanos.

Asimismo, existe una especie de tabú en la sociedad secular democrática moderna en torno a la modificación de la personalidad y los valores del individuo. Los conservadores podrían ver con horror los efectos de la psilocibina y los liberales también, en tanto al supuesto de que modifique los valores de las personas y las haga más (o menos) religiosas.

Sin embargo, detrás de todo esto está el hecho de que la psilocibina funciona y hace que las personas superen su depresión, algo que, para cualquier paciente, es mucho más importante que ser ateo o demócrata.

Quizá lo que nos dice todo esto es que la personalidad es mucho más fluida de lo que pensamos y que nos identificamos demasiado con nuestras ideas y nuestras creencias. Fundamentalmente con nuestra identidad o ego, pues es justo eso lo que la psilocibina disuelve o hace más ligero durante unos momentos. Quizá este mismo apego es parte de la enfermedad y de lo que nos hace tan difícil experimentar la conexión con la vida y el universo que suele producir una experiencia como la de la psilocibina.

 


También en Pijama Surf: Este estudio científico sugiere que tomar "hongos mágicos" podría ser benéfico para los políticos

 

Imagen de portada: Alejandro Tux, Mushroom Observer